El Miami Seaquarium anunció un plan para enviar a la orca Lolita a un santuario costero demasiado tarde
Actualización (26 de septiembre de 2023): Tras la muerte de Lolita, su antiguo compañero de tanque, un delfín llamado Li’i, ha sido trasladado a SeaWorld San Antonio, donde está condenado a pasar el resto de su vida en otra prisión de concreto. Al romper su promesa de enviarlo a un santuario costero, el Miami Seaquarium le ha fallado a este sufrido delfín, tal como le falló a Lolita. PETA está pidiéndole al Seaquarium que libere a todos los delfines que quedan allí en santuarios costeros antes de que también sea demasiado tarde para ellos.
Actualización (23 de agosto de 2023): Después de sufrir durante 53 años en el tanque de orcas más pequeño y antiguo del mundo en el Miami Seaquarium, Lolita murió. No merecía ser secuestrada en el océano y separada de su familia. Nunca debería haber sido confinada en un tanque diminuto, obligada a actuar ni explotada con fines de lucro. Los planes para trasladarla a un santuario costero llegaron demasiado tarde y se le negó incluso un minuto de libertad para sumergirse en las profundidades y sentir las corrientes del océano. Ahora, PETA le exige al Seaquarium que continúe con sus planes de enviar al delfín Li’i, antiguo compañero de tanque de Lolita, a un santuario costero y que haga lo mismo con todos los demás delfines allí; y pide a SeaWorld que envíe a Corky, una orca que ha estado prisionera en pequeños tanques durante casi 54 años, a un santuario costero antes de que comparta el destino de Lolita.
Actualización (30 de marzo de 2023): PETA y personas compasivas de todo el mundo han exigido la libertad de Lolita, la orca, que ha pasado más de 50 años en un tanque diminuto. Ahora, el Miami Seaquarium ha anunciado que tienen los fondos asegurados y se ha llegado a un acuerdo para enviar a Lolita a un santuario costero en su hogar en el océano dentro de los próximos 18 a 24 meses. Este esfuerzo es gracias a la generosidad del filántropo Jim Irsay, propietario y director ejecutivo del equipo de fútbol americano Indianapolis Colts. El anuncio envía una clara señal a otros parques de indiversiones de que los días de confinamiento de mamíferos marinos altamente inteligentes y de gran alcance en prisiones deprimentes han terminado.
Publicación original:
Las peticiones internacionales para liberar a la orca Lolita del tanque para orcas más pequeño y antiguo del mundo en Miami Seaquarium, son más firmes que nunca, ya que ha salido a la luz que el parque no les ha proporcionado a los animales ni siquiera lo mínimo necesario para su bienestar durante décadas. Ahora, todas las miradas están puestas en el futuro propietario de la instalación, The Dolphin Company, para que envíe a Lolita a un santuario costero.
Lolita fue separada violentamente de su familia hace más de medio siglo.
Es la última orca sobreviviente de las más de 30 que fueron capturadas frente a la costa de Washington, y todavía sigue encerrada en Miami Seaquarium mientras el resto de su manada, incluida una orca que se cree que es su madre, nada libre.
Lolita no ha tenido ningún contacto con otra orca desde 1980, cuando su compañero de tanque, Hugo, murió después de golpear reiteradamente su cabeza contra una pared.
Un informe de inspección federal reciente reveló una variedad de violaciones al bienestar animal en la instalación, como alojar juntos a delfines incompatibles que terminaron muriendo por traumatismos, obligar a Lolita a continuar realizando trucos que probablemente le lastimaron la mandíbula y proceder en reiteradas oportunidades en contra de las instrucciones de sus propios veterinarios, entre otras.
En sus hogares naturales, las orcas nadan hasta 140 millas por día y se sumergen a miles de pies en sus aguas nativas. Tener a estos animales cautivos para nuestra diversión es una forma de especismo (una visión supremacista del mundo) y debe terminar.