¡TAILGATE! Anheuser-Busch Amputa la Cola a los Clydesdales de Budweiser
Cuando se menciona el nombre “Budweiser”, pueden venir a la mente varias cosas: cerveza, fiestas de tailgate o “¿Whassup?” ¿Qué pasa con los Clydesdales de Budweiser? ¿Te recuerdan a los comerciales íntegros y agradables que se muestran durante el Super Bowl? ¿Qué hay de la mutilación, el tormento y el dolor?
Es un escándalo que se puede llamar un verdadero tailgate.
PETA se infiltró en Warm Springs Ranch en Missouri (el criadero oficial de Budweiser Clydesdales), visitó Grant’s Farm (donde se entrena a los caballos) y habló con los manejadores que viajan con equipos de caballos adultos. Descubrimos que Anheuser-Busch Companies LLC, que produce la cerveza Budweiser, amputa las colas de los famosos Clydesdales, principalmente para que se vean de cierta manera mientras tiran de la carreta.
Los Clydesdales, como todos los caballos, necesitan sus colas para protegerse de las picaduras de insectos, entre ellos los que transmiten el virus del Nilo Occidental y otros patógenos. Sus colas también son importantes para su equilibrio, movilidad y comunicación:
“La cola sirve de apoyo y facilita la defensa contra insectos, la comodidad, el bienestar, la reproducción y la prevención de enfermedades. Es abusivo e inhumano privar a un caballo de su cola. La amputación de la cola resulta en una vida con problemas de equilibrio al correr y girar a gran velocidad. Es abusivo con los animales y médicamente poco digno privar a un caballo de su cola, excepto en casos de necesidad médica.”
— Sid Gustafson, veterinario equino
Amputar la cola de un caballo (conocido como “corte de cola”) es tan cruel, que este innecesario procedimiento cosmético está prohibido en 10 estados de EE. UU. a menos que sea médicamente necesario, y en varios países. La Asociación Americana de Profesionales Equinos “condena la alteración de la cola del caballo con fines estéticos o competitivos”. La Asociación Americana de Medicina Veterinaria (AVMA, por sus siglas en inglés) está de acuerdo y dice: “El procedimiento viola los Principios de Ética Médica Veterinaria de la AVMA. Los veterinarios que realizan el procedimiento en los Estados Unidos están violando el código de ética”:
La amputación de la cola implica lo que un veterinario equino llama “abuso quirúrgico”. Cuando los Clydesdales de Budweiser todavía son potros, los huesos de sus colas, que son parte de sus columnas vertebrales, son total o parcialmente amputados, ya sea con un bisturí o colocando una banda alrededor de la cola para detener el flujo de sangre. Eventualmente, la cola cae.
Según expertos veterinarios, ambos procedimientos son muy dolorosos, el método de la banda es especialmente insoportable. El sufrimiento causado por la amputación de la cola puede persistir durante toda la vida del caballo, como se señaló en un artículo publicado en 2018 de Scientific American:
Muchas personas que crían caballos de tiro participan en la brutal práctica del corte de cola, en la que se cortan los huesos de la cola de un caballo, principalmente por razones estéticas. Nuestro trabajo muestra que la cola de un caballo no es solo un adorno. La cola es su principal línea de defensa contra las picaduras de insectos.
Mira estos Clydesdales en constante angustia, incapaces de protegerse de los insectos:
“El procedimiento es doloroso después de semanas, y muchas personas del medio realizan el horrible procedimiento sin anestesia y mediante la aplicación de fuertes bandas elásticas que provocan la falta de circulación y una pérdida lenta y dolorosa de la cola. … La amputación de la cola es un procedimiento despreciable y vergonzoso que inflige daños irreparables e irreversibles al caballo.”
— Sid Gustafson, veterinario equino
Algunos de los representantes de Budweiser engañan al público sobre lo que se les hace a estos caballos, y sus declaraciones se suman al escándalo del “corte de cola”. El personal de Warm Springs Ranch afirma que simplemente “halan” las colas, lo que significa afinar la cola envolviendo los pelos alrededor de un peine y arrancándolos, para mantenerlos limpios durante la reproducción y el parto. En un desfile en Annapolis, Maryland, donde se presentaban a los caballos, un manejador de Clydesdale negó que les amputaran la cola.
Manejador de Budweiser Clydesdale 1: Si son largos, pueden agarrar la línea… es una cuestión de seguridad.
Investigador: ¿Le cortan la cola?
Manejador de Budweiser Clydesdale 1: No, solo las recortamos semanalmente. Todavía tienen sus colas, solo les cortamos el pelo.
Investigador: Oh, entonces mantienen las colas completas, ¿solo están atadas?
Manejador de Budweiser Clydesdale 1: Sí.
Pero algunos otros representantes estaban dispuestos a hablar, incluso un guía turístico en Grant’s Farm:
Sí, se cortan desde el principio. Lo sé. Y es por razones de higiene. También es cuando se preparan aquí, hacen un moño y le ponen un lazo en el moño. Y es solo para que no se enreden en las riendas y esas cosas; entonces sí cortan la cola, porque llegarían hasta el suelo.
En el desfile de Annapolis, otro manejador de Clydesdales también le dijo a un investigador de PETA que les cortaron la cola a los caballos:
Investigador: ¿Están cortadas?
Manejador de Budweiser Clydesdale 2:: Sí… No sé exactamente cuándo lo hace Budweiser, pero por lo general cuando son muy jóvenes.
Las presuntas razones de “seguridad” para este maltrato no se sostienen. Trenzar el pelo de la cola de los caballos y luego envolver la cola con material de vendaje, como se hace con frecuencia cuando se transportan caballos, evitaría que la cola quede atrapada en el equipo de enganche de la carreta:
“La práctica se originó a partir de la pereza humana. Era más fácil para las personas desconsideradas con los caballos de tiro y los animales, cortar la cola de los caballos de tiro bebés, infligiendo un deterioro de por vida del comportamiento normal, en lugar de tomarse el tiempo para trenzar o atar las colas y poner el arreo correcto como es la costumbre de la gente sensible con los animales. Todos y cada uno de los problemas percibidos por los humanos con respecto a las colas de los caballos para equitación pueden manejarse de manera adecuada, humana y efectiva. No hay problemas de seguridad con los caballos que tienen la cola completamente intacta.”
— Sid Gustafson, veterinario equino
PETA contactó a Anheuser-Busch y le exigió a la compañía que prohíba la amputación de la cola de inmediato. Pero nadie se molestó en responder.
Así que PETA lo está haciendo público con su propio anuncio de Clydesdale…
… y vallas publicitarias: